sábado, 15 de marzo de 2014

Urgencia

Hoy, después de pasar la mayor parte del día con mi crisis existencial, pensando cuál es mi misión en esta tierra, me enteré que un amigo de la familia estaba en urgencias debido a punzadas en el pecho. Como no tenía nada que hacer, pensé que sería buena idea ir a acompañarlo, así que fui. Viendo a toda esa gente enferma esperando ser atendida, me creó pensamientos encontrados. Por una parte, agradezco al Creador por haberme hecho en su mayor parte sana o tener el conocimiento de que toda enfermedad es la manifestación de nuestras acciones, aunque a veces preferiría nunca haber tenido este "bendito" conocimiento, ya que es muy cansador estar consciente de mis actos y ver cómo actúan los demás; sin embargo, por otra parte, me crea más la necesidad de saber cuál es mi misión acá, porque si vine ayudar en algo quisiera saberlo para empezar desde ya. Mi espíritu pide a gritos eso, pero por más que solicito que se me revele eso, no pasa nada. Por el momento, trato en lo posible de realizar buenas acciones y así alimentar un poquito mi alma y mi espíritu, que en verdad al parecer si ayuda, solo hubiese preferido que todo fuese inconsciente; ojalá me acostumbre y realice todo lo bueno por inercia, como siempre debió haber sido. En fin, creo que ahora trataré de inspirarme con The Persuit of Happiness.

viernes, 14 de marzo de 2014

Vocación

Muchas veces en este camino de la vida tomamos decisiones. Muchas de ellas correctas, pero otras, lamentablemente equivocadas; sin embargo, son de estas decisiones de las cuales aprendemos.
Es así como una mala decisión me llevó al lugar en el que estoy ahora. Estudié algo que me aseguraba un buen pasar económico y me ofrecía una vida cómoda, sin horarios ni jefes presenciales. Pero qué hay de mi alma, ella en estos momentos no está contenta con eso y, en consecuencia, yo tampoco. Todos venimos de la misma fuente, por lo cual todos tenemos los mismos talentos, unos más desarrollados que otros. La vida siempre me decía que diera un paso atrás y me retirara de donde estaba y nunca le hice caso, y ahora pago las consecuencias.
Muchos luchan por lo que quieren dedicarse en la vida, por su vocación, pero qué sucede cuando no tienes idea de cual es la tuya. A mí no me importaría empezar de nuevo, bueno sí un poco, pero no tengo idea que es lo que debo hacer, a qué dedicarme, si lo supiera todo sería distinto. Mi orientador me dice que siempre habrá cosas que nos gusten, pero la pregunta es a cuál te gustaría dedicarte, que es lo que harías con gusto y se te pasaría la hora haciéndola. Es una pregunta que me hago todas las noches, tratando de que mi almohada me responda, pero aún no logro nada. De modo que si alguien lee esto, solicito su ayuda para unir fuerzas ya que lo necesito. ¡Muchas gracias!

martes, 11 de marzo de 2014

Humildad

Hoy fue uno de esos días reguleques, con mucha introspección, tratando de tolerar a mi hermano que está al lado de mi pieza acá donde mis papás, que tiene la costumbre de decir garabatos mientras juega con la consola de videojuegos. Mi yo antiguo quizás hubiese reaccionado con mucha rabia,  pero estoy tratando de ser más tolerante, además que sé que al final el único daño se lo hace él mismo, así que le envié un mensaje por whatsapp de que si podía rezar más despacito por favor, solo espero que todo este sacrificio de mejorar como persona de sus frutos pronto.
Pretendía ir a ver una película, pero no sé si serán por las pastilla que he andado con sueño así que me dispuse a dormir una siesta. Claro, que puse la alarma pero el 5 minutos más, se convirtió en una hora y cuando al fin desperté ya era muy tarde.
Todos los que estamos en este planeta venimos a aprender algo, la vida no es un patio de recreo como muchos piensan. En mi caso y gracias a mi espíritu guía o no sé quien que me habló en mis sueños, pude saber que fue lo que vine aprender, y es la humildad. Muchos pensamos, o por lo menos yo lo hacía hasta hace poco, que esta virtud trataba del estatus económico o agachar la cabeza cuando alguien te adulaba, pero me di cuenta que no era tan solo eso. Es mucho más y es algo bien complicado, por lo menos en mi caso, de poner en práctica. Para mí es difícil porque soy muy egocéntrica, pero estamos trabajando en eso. El querer ganar más dinero me llevó a esto, pero creo que aún estoy a tiempo de revertirlo. Todo los días le pido a las fuerzas superiores que me apoyen y no permitan que caigan. Solo espero lograrlo para poder evolucionar y así ser más feliz y compartir aquella felicidad con mi familia y mi pareja.

Cuando comencé a leer un artículo de cómo ser humilde (http://es.wikihow.com/ser-humilde) me llegó demasiado, porque estaba haciendo todo lo contrario. En el colegio y los institutos, era de esas personas que no le gustaba trabajar en grupos porque me creía superior que los demás, que nadie lo iba a hacer las cosas como yo. De hecho ahora que escribí esto, recuerdo que cuando estudiaba mi carrera computacional hice un trabajo sola el cual no terminé porque no me la pude no más. Ahora que veo las cosas un poco más claras, como me gustaría retroceder el tiempo y remediar todo eso, pero como no se puede o por lo menos no todavía, no me queda nada más que sembrar el presente para cosechar en el futuro y haciéndolo de la mejor forma posible.

Reconozco que tengo muchas fallas, y quien no las tiene, lo importante es reconocerlas y poder superarlas, solo espero que las fuerzas superiores no me dejen sola, porque hasta ahora no lo han hecho.


Ahora los dejo, porque seguiré leyendo "El Clan Curie".

lunes, 10 de marzo de 2014

Puerto Montt

Primero que todo, quiero comenzar diciendo: "Bienvenidos a mi blog". Lo que me trajo a este mundo fue mi necesidad de compartir situaciones, pensamientos y cosas que me suceden en mi diario a vivir con aquellos que el destino los haya invitado a ingresar acá, porque el que hayan entrado no es casualidad; todo está conectado.

¿Por qué el título? Bueno, eso se lo debo a que de un tiempo a esta parte, trato de enfocarme en mi presente, ya que enfocarse en el pasado y en el futuro no resulta mucho, aun cuando siempre, como humanos que somos, caemos en eso, pero no es muy sano eso, de hecho muchas veces lo único que nos trae son dolores de cabezas, problemas y estrés. De hecho, tal como leí una vez en facebook de un amigo, en el año existen 365 días y cada uno de ellos son oportunidades para ser mejor y aprender en este planeta en el que nuestro ser vino a evolucionar.

Les advierto que en mi situación actual es muy probable que haya días en que escriba cosas muy bonitas que me hayan ocurrido y otros quizás no lo sean tanto, pero esperemos que sea solo lo primero en su mayoría.

Por ejemplo, hoy fue uno de esos días buenos, como me gustaría que fuesen siempre. Me levanté bien de madrugada para alcanzar alguna hora para dentista, ya que hace algunos días comencé con los malestares de la muela del juicio nuevamente. Lamentablemente, no había horas pero tuve la suerte de que atendían de urgencia, así que ahí me revisó la doc y me mandó con un puñado de pastillas para bajar la infección y poder abrir la boca nuevamente, ya que ni siquiera llego a los 30° de apertura. Mientras me atendía, pensaba que genial es cuando alguien ama lo que hace, logra transmitir eso y lo que es más importante, brindar una excelente atención.

Más tarde, después de sacarme la radiografía que me habían solicitado, un señor me pregunta dónde vendían pescado. Le di las indicaciones y como iba hacia el mismo lado, lo acompañé y nos fuimos conversando. Era un señor de edad, exmilitante que venía de Puerto Montt. Nos fuimos caminando por alrededor del mar, y me contaba que le impresionaba ver tantos  botes pesqueros, así como también, pelícanos y lobos marinos, ya que allá no había tantos. Al principio, creía que él quería comprar pescado para cocinar, pero después me enteré que era para comer, es decir, quería un restaurante. Menos mal que estaban cerca, así que llegamos hasta ahí y me despedí. Él muy amablemente me invitó a almorzar, sin embargo, rechacé la invitación porque tenía que hacer otros trámites y mi madre había cocinado unos exquisitos porotos granados, de lo contrario, me habría quedado a compartir más tiempo con él.

Es gratificante cuando uno hace alto en su vida y trámites y comparte aunque sea un momento con otras personas, aunque sean desconocidas. Se siente tan bien espiritualmente, el corazón se alegra y casi nada puede salir mal. Sin embargo, muchas veces nos olvidamos de eso y nos creemos el centro del Universo, y estamos en nuestro mundo del "yo", muchas veces mezquino y egoísta, pero siempre hay oportunidades para cambiar eso, solo tenemos que estar atentos a las señales.

Bueno ahora los dejo, porque quiero leer un folleto que me regalaron camino a casa. Aunque estoy aprendiendo a no identificarme con ninguna religión, acepto todo lo que llegue a mis manos con mucho cariño, ya que todo tarde o temprano me servirá.

Cuando puedan envíenme amor con sus pensamientos y que ustedes reciban el doble.  Muchas gracias.


Un abrazo y buenas noches.